miércoles, 23 de abril de 2014

Lo nuevo de Cuc de Pi

El pasado mes de Enero realicé una sesión fotográfica con el estudio de Las Nenikas.

La verdad es que no habría podido quedar más contenta. Y es que cuando se trabaja a gusto, se nota en el resultado. No hay mucho más que decir. No podría haber elegido mejor compañía.

Os pongo por aquí algunas de las joyas de estas dos albaceteñas.

Fotografía: Pamela Carrasco
                 Majo Fernández (Las Nenikas)

Modelo: Merce Moreno Monsalve

Peluquería y Maquillaje: Ana Díaz  

También recordar (e informar) de que he puesto en la barra lateral, un enlace permanente a mi tienda en Etsy. Pero también podéis llegar allí pinchando AQUÍ.








martes, 22 de abril de 2014

Pudín de maracuyá, naranja y vainilla

Pues bien, he decidido crear la nueva etiqueta "cocina", ya que parece ser que voy a ir probando algunas recetas. Por el momento, solo repostería, pero más adelante ya se verá. ¿Quién diría eso de mi?

La idea de preparar este pudín, vino del desastre que ocasioné con unas magdalenas. El caso es que preparé unas magdalenas de vainilla. Compré azúcar vainillado y todo, no fuera a ser que saliesen malas. Pero a la hora de hacer el mix de los ingredientes olvidé echar aceite a la mezcla. Resultado: Además de que no estaban muy buenas de sabor, al día siguiente estaban más duras que una piedra. Intentamos comerlas, pero al final preferimos no hacerlo por nuestra salud dental. No fuese que al morder una de aquellas magdalenas se nos cayese un diente.


Bien el tema es que me da noseque el tirar comida, así que empecé a buscar en google "Reciclar magdalenas", así tal cual. Y como creo que ya va ir siendo propio en mí, hice un refrito de recetas y el resultado fue el siguiente.


Esta mal que yo lo diga, pero estaba espectacular, un sabor riquísimo, y una textura suave y esponjosa genial. En fin, os dejo por aquí la receta:

Ingredientes:
  • Apróx. 15 magdalenas. (También leí en algunos blogs que se podía hacer con pan del día anterior, pero ya no se si quedará algo soso).
  • 1 litro de zumo de maracuyá. Supongo que se puede sustituir por el sabor que se desee, yo elegí este por que me pegaba con la vainilla. 
  • Una cáscara de naranja. (Con algo de pulpa, en este caso yo compre una naranja caramelizada).
  • 4 huevos. 
  • 4 cucharadas de azúcar.
  • 4 cucharadas de agua.
  • Medio limón. 
Preparación: 
  1. Lo primero es dejar las magdalenas a remojo con el zumo. Las puse todas en un cuenco, a trocitos, y vertí el zumo. Lo dejé al menos media hora, hasta que desapareció todo el jugo. 
  2. Hacer el caramelo. Yo pensé que iba a ser muy difícil, pero no. En una sartén antiaderente, puse primero el azúcar y el agua. 4 cuatro cucharadas de cada. Cuando empezó a hervir eché el limón, si que es verdad que medio quizás es mucho, así que se puede echar el que a uno le apetezca. Una vez había burbujitas apagué el fuego y fui dando vueltas hasta que la mezcla se volvió marrón, y olía a caramelo. 
  3. Antes de que se enfrie hay que echarlo al molde, y esparcirlo un poco por la base. 
  4. Con un tenedor chafé un poco las magdalenas, en otro cuenco batí los huevos, les puse un poco de azúcar vainillado, e hice mucha espumita para que luego quedase el pudín más jugoso. 
  5. Después ya mezclé los huevos, con las magdalenas y el zumo, y con la cáscara de naranja. 
  6. Y todo junto al horno. Lo puse 170º unos 40 minutos, pero le puse debajo una placa de horno con dos deditos de agua y un trapo en el fondo. 
  7. ¡Y se acabó! Tengo que decir que no pude evitar probarlo caliente, pero que frío estaba aún mejor.
Disfrutadlo! :)

martes, 15 de abril de 2014

Vestidos de cine

Con el post de ayer, me entraron ganas de investigar un poco sobre el vestuario de cine. Estuve un rato mirando webs y blogs serios de moda, y... Pfffffffff.

Parece ser que las blogueras/redactoras no tienen mucho cine visto, y sus seguidoras somos (me incluyo) un poco borregas, y no les discutimos nada de nada. Allá por los felices 2000, alguien debió escribir un post, o un articulo, con los diez mejores vestidos del cine, y desde entonces esa lista ha ido redundando por el mundo de la moda. No digo que los vestidos que ellas nombran no sean absolutamente geniales, estoy de acuerdo en la mayoría de los casos, como en el vestuario de La ventana indiscreta, en Gilda, Desayuno con diamantes, etc. Pero luego, y supongo que lo hacen para justificar look más actuales, (y para mi injustificables) meten en la lista a Diane Keaton en Annie Hall, o al vestuario de lo que el viento se llevó. ¿En serio?

Pues yo me niego. He pasado el día de hoy elaborando una lista , con fotos y todo, de los que para MI son los mejores vestidos del cine. La verdad es que en algunos casos ha sido casi imposible sacar fotos y he sacado las imágenes de la misma película, con lo que algunas se ven "algo" mal. Pero la síntesis está ahí. Obviamente, para muchas serán un NO rotundo, pero como he dicho antes, esta lista es a mi gusto. Por cierto, viendo el resultado, podría decir que soy un poco urraca.

He pensado ponerlos en el siguiente orden: de los que MENOS me gustan, a los que MÁS.
En fin, vamos allá:

1. Kate Capshaw en Indiana Jones y El templo maldito (1984).

Desde pequeña me tenía fascinada, ella no es nada glamurosa y lo lleva fatal, pero aún así me encanta.


2. Bette Davis en Eva al desnudo (1950).

El vestido era en realidad rojo, más bien tirando a granate. Un dato curioso es que la misma Marge Simpson lo ha llevado en azulón y verde. 


3. Kelly Lebrock en La mujer de rojo (1984).

La película no es muy allá, pero el vestido... Siempre que pienso en un vestido rojo, pienso en ese vestido. 


4. Thandie Newton en las Crónicas de Riddick (2004).

Es obvio que para llevar uno de estos dos vestidos tienes que tener un cuerpo como el de ella. Pero el vestido beige, es sin duda uno de mis favoritos. Puede que el tema del corsé me haya influido un poco, además de que me encanta el tema "piel" (No la llevo, pero me encanta). 


5. Sharon Stone en Casino (1995).

Puedes odiar el personaje en la película, pero no su ropa. Me gustan sobre todo los vestidos largos, (y brillantes...) pero todo el vestuario de la película para Sharon Stone es increíble. 


6. Marilyn Monroe en Los caballeros las prefieren rubias (1953).

La diva indiscutible. Marilyn me encanta con cualquier cosa. Casi siempre la sacan en las listas con el vestido blanco al vuelo, pero yo desde luego la prefiero con cualquiera de los vestidos que salen a continuación. El palabra de honor rosa, es todo un clásico, tuve uno igual en rojo, y por que no encontré en rosa. El vestido rojo de manga larga, no se cuantos millones de veces lo he visto, reconvertido y modernizado, en todas las temporadas.  


7. Diane Lane en Cotton club (1985).

Me encantan los tocados y los sobreros, pero también todos los vestidos que aparecen. 


8. Monica Bellucci en The Matrix Reloaded (2003).

Se que el látex no suele gustar mucho, y que siempre tiene connotaciones sexuales, (en la película también), pero es que cuando vi este vestido por primera vez el corazón se me paró. Estuve buscándolo bastante tiempo, y es imposible de comprar, cosa que quizás haga que lo quiera aún más. Aún con todo eso, este vestido es fabuloso. Por no decir, que ha creado tendencia desde entonces, si no me crees: imaginalo en cualquier otro tejido y color. 


9. Kate Beckinsale y Gwen Stefani en El aviador (2004).

No es de extrañar que los vestidos que aparecen en esta película sean fabulosos, ya que según tengo entendido, son copias de vestidos originales de la época en la que se ambienta. Me encantan todos, pero todos todos, lo que salen, pero los que más me gustan son los que lleva Kate Beckinsale y el blanco de Gwen Stefani. 


10. Audrey Hepburn en Sabrina (1954).

Sé que muchos la odian, la usan tanto y tanto, sobre todo con el vestido negro de Desayuno con diamantes (1961), que la tenemos un poco machacada, he visto por ahí que algunas la sacaban también con el vestido a rayas de My fair lady (1956), pero para mi, este es el mejor de los vestidos que ha llevado. 


11. Kim Basinger en L.A. Confidencial. 

No entiendo con lo precioso que es el vestido blanco, y lo que cuesta encontrar una foto decente de él. Para mi es un indispensable. La parte de atrás la e tenido que coger de la película directamente, no se ve muy bien, pero nos hacemos una idea. El resto del vestuario, es genial también, cosa que no me sorprende ya que han copiado los estilimos de Vivian Leigh. Sale un vestido negro con escote de corazón, que me ha sido imposible de fotografiar, pero si he encontrado el original (centro, abajo). 


12. Zhang Ziyi en 2046 (2004).

Yo soy una apasionada de lo oriental, así que es normal que estos vestidos estén en los más alto del ranking. Me gustaron sobre todo por que combinaban elementos vintage con orientales. Me pareció una mezcla muy equilibrada, y super elegante. He de decir que mi preferido es el de color champagne con el cuello de pedrería (como no, brillos y más brillos...) pero todos, absolutamente todos son preciosos. También recuerdo a la protagonista de la película Memorias de una geisha (2005), aquellos kimonos...


13. Marylin Monroe en Con faldas y a lo loco (1959).

Tenía que ponerla otra vez. Pero es que el vestuario de esta película lo amo todo. Los dos vestidos de escotes INCREÍBLES de Marilyn son dos clásicos, y es que hasta los vestidos que llevan Tony Curtis y Jack Lemmon me parecen preciosos. 


En esta película quiero hacer mención especial al conjunto negro con el que Marilyn sale al principio de la película. Tengo que decir que después de mucho buscar el año pasado conseguí comprar una falda de flecos como esa, ya tengo el ukelele también, en cuanto consiga una blusa como esa... 


14. Mia Farrow y Lois Chiles en Muerte en el Nilo (1978).

No entiendo, y lo digo con la mano en el corazón, como una película que ganó tantísimos premios de vestuario, puede pasar tan inadvertida. Todos, pero todos, los estilismos que aparecen son dignos de mención, incluso los de Bette Davis y Angela Lansbury. Aquí tengo varios preferidos. Vamos por partes. 
Primero Mia Farrow, que no solo en esta película, si no en casi todas las que aparece, lleva unos vestidos preciosos. 


Lois Chiles, ex-chica Bond, va durante todo la película espectacular. Incluso los vestidos de diario me gustan. 


 Y por último, el rey de reyes, es el vestido plateado. El día que tenga que ir guapa de verdad, me haré este vestido. (Siento que se vea tan mal, pero es que he sido incapaz de encontrar fotografías de él... Pero como compensación dejo el trailer de la película.) 


lunes, 14 de abril de 2014

Proyectos, proyectos, poyectos...

Soy una persona que suele abarcar mucho, y ahora que tengo tiempo libre más aún.
Entre mis nuevos proyectos están, un par de historias (o tres, que jamás serán publicadas...), tres suéteres, la reanimación de Usagi San, la reanimación de Reflexiones Ilustradas, estoy esperando las nuevas fotos de Cuc de Pi, con lo que reabriré la tienda de Etsy, necesito hacerme dos vestidos para dos bodas, una en mayo y otra en octubre. Además tengo pendientes las clases de bolillos, un conejo amigurumi por terminar, estoy aprendiendo Alemán, proyectos de costura pendientes, y he conseguido reactivar la Cardigan Magazine. 

 Y aún siento que estoy dejando de lado algo. Como ponerme al día con el ganchillo, sacar unas plantillas de bordado, mejorar la plantilla para la Cuna de eros, o acabar de montar mi maqueta del castillo ambulante. ¡Ah! También estoy intentando incrementar mi habilidad en repostería, pero eso ya sé que es algo imposible. También tengo una lista de lectura que me durará hasta el año que viene, y siempre, pero siempre, va creciendo.

Hace poco, T. me acusaba (me resaltaba) de ser una persona que empezaba la cosas y nunca las acababa. Y creo que tiene razón. Estoy bien orgullosa de haber terminado mi carrera, no por que sea una de mucho prestigio que me dará mil y un trabajos, si no por que creo que es la primera vez que empiezo algo y lo termino. Estudiar bellas artes es algo más inútil que una bicicleta sin ruedas, pero es tan gratificante...

En fin, hoy vengo a contar aquí uno de mis proyectos de costura, a ver si así me da vergüenza el no terminarlo. En este caso, el no empezarlo.
Me pasa muy a menudo que veo ropa en la tele, o en el cine, en alguna revista, y me enamoro. Luego pienso que soy capaz de hacerla yo misma, y me suelo poner manos a la obra. En este caso me pasó con el vestuario de Adler, en Sherlock Holmes (2009). Tiene tres estilismos que me encantan, uno es el vestido victoriano con chaquetilla de color fresa, el otro el el abrigo azulón de jaquard, el de las mangas de murciélago, y el otro es la chaquetilla tipo americana de picos en color morado. Esa última la amo. De hecho la amo tanto que me compre la tela para hacerla para mi. Pero hace unos dos años que la tengo en el cajón. Así soy yo, siempre pienso que las cosas son muy fáciles, luego no estoy satisfecha con como va quedando, y finalmente acabo rindiéndome. Si vendiese todos los retales de tela que tengo, podría comprarme un coche nuevo. Hoy me he puesto con el patronaje, que parece muy sencillo, pero tiene su aquel. No se si esta vez terminaré, pero mientras dibujaba lineas me ha venido a la mente una idea. (Otra más...) Y además puede que la use para movitarme a terminar esta chaqueta victoriana. Ya iré contando mejor. De momento, os dejo las fotos de los tres estilismos de Adler que he comentado antes.

Disfrutadlos. :)